Diferencia entre revisiones de «Pautas para la Maestría en Relaciones»

Las Pautas para la Maestría en Relaciones consisten en nueve pasos básicos y es un método de Servicio a Otros basado en la Ley del Uno para cultivar un Comportamiento GSF, mientras se aprovechan los mutios beneficios energéticos de experimentar una conexión más espiritual y un más profundo amor y aprecio de los demás hacia ti. Sin apegos o expectativa, esto  sucede de manera natural cuando se siguen algunas pautas básicas. En ciertas áreas en las cuales hemos pedido "crecimiento espiritual" más allá de cualquier otra cosa, podemos tener períodos en los cuales somos sometidos a profundas pruebas respecto a nuestra verdad personal y creencias personales. Eventualmente, todos somos capaces de estar en este mundo, aunque no seamos de aquí, y de compartir lazos de plenitud, amor y gratitud con otros, ya sea en grupos o en nuestras relaciones personales.

1. Autorresponsabilidad - Ser capaz de hacerte cargo de tus propios conflictos emocionales sin culpar a alguien más, culparte a ti mismo ni proyectarlos sobre otra persona haciéndoles culpable de ello. No asumas que sabes algo acerca de esa persona que puedes juzgar, a partir de lo que no ves o no conoces realmente, dado que no has estado en sus "zapatos". Cuando te sientas molesta, restaura el equilibrio de tu corazón y tu aura, sosteniendo tus límites amorosamente y sin infringir los límites de otros, al esperar que ellos resuelvan tu conflicto. Mantente dispuesta y abierta a aprender de qué se trata el "verdadero problema", ya que la mayoría de las veces no es lo que parece ser. El profundizar y reflexionar en la energía del perdón hacia ti mismo y hacia otros, dando tiempo, neutraliza el conflicto. Consulta Autorresponsabilidad.

2. Conservación - Ser capaz de discernir el uso correcto de Acción para aprovechar las preciosas energías de fuerza de vida y tiempo a fin de ser más eficaz e impactante. Cultiva la sabiduría respecto al momento en el cual participar y aprender, cuándo no involucrarte con los demás o con circunstancias conflictivas. Ninguna persona necesita justificar su existencia ante otro ni cuidarse respecto de lo que la gente piensa de ellos. Mantente alejado de los berrinches o dramas emocionales y no participes en formas que puedan alimentar el drama y derivar en un caos. Las fuerzas oscuras utilizan el drama para instigar divisiones y caos entre tú y los demás, haciéndonos menos eficaces y dispersos en relación a nuestras energías. La conservación de la energía implica un enfoque más fuerte, y uno se vuelve más eficaz y productivo. Cuando aprendemos esta habilidad, ganamos más recursos y la conexión con nuestras fuentes espirituales. Si perdemos el tiempo y la energía, llegamos al umbral de energía en el cual ésta no puede aumentarse, nos vemos drenados y eso disipa nuestra influencia positiva. Consulta Conservación.

3. Respuesta - En este momento, aprende a elegir tu respuesta en vez de reaccionar a los acontecimientos de la vida, la gente y las circunstancias. La reacción es la programación subconsciente y operada mayormente a partir de ideas preconcebidas, del miedo o el control mental. Observa tus reacciones y pide a tu cuerpo que te muestre la historia o la memoria detrás de la reacción. A medida que uno aprende a preguntar acerca de las reacciones que genera, se aprende mucho acerca de la conciencia del cuerpo, y se puede sanar y limpiar efectivamente liberando la reacción. Técnicas de catarsis emocional (la Práctica de la Tríada Central de ES contiene estas técnicas) ayudan a liberar la historia del cuerpo para que pueda volver a un nuevo patrón libre del dolor reactivo. La elección de perdón, la bondad, la compasión y el amor propio, es toda una decisión que uno tiene el poder de realizar a cada momento, mediante la elección de su respuesta hacia sí mismo y hacia otros. Consulta Responder.

4. Reverencia - Todos los seres tienen el derecho a existir y a coexistir. Mediante el aprendizaje de que existen beneficios mutuos presentes en todas las relaciones, y al respetar el derecho de cada persona a existir, demostramos respeto por la fuerza de la vida en todos sus aspectos y permutaciones. Evita los comportamientos de crítica, presunciones, acusaciones irrespetuosas o perjudiciales, controlar o manipular a otros, dar consejos no solicitados o plantear exigencias. Vive y dejar vivir. Consulta Reverenciar.

5. Humildad - Al conocer y aceptar su lugar en el Universo y el rol que juega, uno actúa con humildad sabiendo que Todo es una parte de la Fuente de Dios. Todo es igual en el Amor de Dios, y ningún ser se juzga como mejor, más alto o más valioso que otro. Al actuar desde la humildad y en servicio espiritual, cuando sientes el llamado a hacer algo que responde a tu corresponsabilidad/custodia (stewardship), incluso si se trata de limpiar baños, acepta el trabajo dado, en humildad. No existe ningún derecho autoadquirido en el servicio espiritual. El derecho autoadquirido es una distorsión de la ambición espiritual y ego negativo y, de no controlarlo, dará lugar a una "caída raíz". Consulta Humildad.

6. Discernimiento - Sin usar el juicio del ego, comprueba la resonancia personal de las personas y los eventos con los cual elijas para involucrarte o intercambiar energía, en cuanto a si están o no alineados con tu resonancia en ese momento. No existe lo correcto o incorrecto, únicamente existe la resonancia personal. Esa respuesta puede cambiar continuamente en diferentes líneas de tiempo, dependiendo de cuándo se pide discernimiento. El aprendizaje del discernimiento personal construye tus límites necesarios para descubrir aquello que es productivo y que apoya al cumplimiento de tu trayectoria álmica o no. El discernimiento permite el crecimiento productivo continuo y el uso eficaz de tus energías personales y atención enfocada. Respeta tus límites personales mediante la aplicación del discernimiento hacia todas las cosas en las cuales enfocas tu atención o tu energía. Consulta Discernimiento.

7. Conocimiento directo - Al sentir en el momento lo que tu energía te está comunicando, suspende el pensamiento lineal y entrega la charla mental, enfocándote en "sentir" lo que "sabes" en ese momento presente. El estar atenta a tu respiración en el momento y sentir la firma energética del entorno, abrirá tus sentidos para permitir que la energía brinde impreciones e información a tu cuerpo, sin palabras. El conocimiento superior se hace presente y se conecta a ti en todo momento. Lo que ahora "sabes", es todo lo que se necesitas. Respira y disfruta de lo que está delante tuyo ahora como "conocimiento directo". A cada momento que te encuentres en el "sentir", el conocimiento directo estará presente.  Cuando te encuentras en el "sentir", tú "sabes" más de lo que mentalmente reconoces de ti mismo. ¿Cómo se Siente este Ahora? Deje que la energía y el sentimiento respondan a tu corazón. Consulta Conocimiento Directo.

8. Entrega - Al estar presente en el momento y entregarte al ahora, los juicios y las expectativas de futuro de los demás se disuelven. Cada conexión o contacto sostiene una oportunidad para el crecimiento y el aprendizaje, intenta neutralizar el pensamiento polaridad, preguntando el significado más profundo, el cambio necesario o la lección de crecimiento inherente a la circunstancia. El entregarnos al ahora y el sentir nuestros sentimientos mientras sostenemos amor incondicional, permite una mayor aceptación para neutralizar situaciones dolorosas o confusas. Si nos contraemos en una "posición" y nos aferramos a defender la situación, amplificamos la negatividad de la situación y nos colocamos en un espacio de vulnerabilidad a interferencias y voluntades superpuestas. Dejar ir y da lugar a Dios. Consulta Entrega.

9. Sé Verdadero Contigo Mismo - Honra a todo tu ser y tu fuerza de vida. Indaga y conoce el contenido de tu corazón, y únicamente brinda a otros aquello que se siente alegre y alineado a tu persona. No negocies ni sacrifiques tu verdad; sin embargo, no evites las tareas que construyen la disciplina del carácter personal. Pregunta a tu ser multidimensional qué necesita para sentirse equilibrado y feliz, presta atención a tu bienestar físico y energético, y genera amor y bondad hacia ti mismo. Como si fueses tu propio padre, amoroso pero firme, brinda generosamente reconocimiento y apreciación amorosa a tu niño interior. Consulta Ser Verdadero Contigo Mismo.[1]