Iniciación Solar
La consciencia dentro de nuestro Sistema Solar está experimentando su propio nivel de Iniciación Solar a través del aumento de las emisiones de plasma solar y el próximo eclipse solar total, también conocido como el Gran Eclipse Americano del 21 de agosto de 2017. La última vez que se vio un eclipse solar total en todo Estados Unidos fue durante el eclipse del 8 de junio de 1918. Un eclipse solar ocurre cuando la Luna pasa entre la Tierra y el Sol, oscureciendo total o parcialmente la imagen del Sol para un espectador en la Tierra. Un eclipse solar total ocurre cuando el diámetro aparente de la Luna es mayor que el del Sol, bloqueando toda la luz solar directa, convirtiendo el día en oscuridad.
Recientemente, las emisiones de plasma solar que interactúan con la ionosfera de la Tierra cambiaron rápidamente la forma y dirección del campo magnético, además de generar tormentas geomagnéticas, auroras y un incremento en el alcance de la fuente de plasma de la Tierra. Es una clara evidencia de que estamos experimentando una Iniciación Solar intensa de radiación de luz plasmática, así como también estamos en la etapa previa al próximo evento de eclipse total, que está progresando rápidamente en la evolución de las humanidades en nuestro viaje espiritual elegido sobre esta Tierra. Los eclipses cambian los cimientos y la estructura del orden cósmico para impulsar la evolución de la consciencia hacia otro camino, el resultado es una sacudida del status quo y la ruptura de las energías estancadas. Junto con la sensación de que nos estén apretando para pasar a través del ojo de una aguja, con el fin de salir del otro lado en situaciones completamente diferentes o incluso como una persona diferente y cambiada. Este Eclipse Solar Total tiene especial consideración en la activación del nodo norte en las Cuatro Estrellas Reales, sentado en la posición norte de Regulus, que es la estrella dominante en la constelación de Leo. El número 23 está asignado a Regulus en Leo para la Estrella Real del León, y como tal hay rituales ocultistas que usan el número 23 para amplificar las redes mágicas negras y sus estructuras anti-vida.
Sin embargo, a medida que uno se acelera hacia la iniciación espiritual y hacia frecuencias más altas que instigan la Activación del ADN, como cuando el Cuerpo de Luz se conecta con la transmisión de Plasmas solares y el cambio de cimientos como resultado del eclipse solar total, muchas personas pueden experimentar un rango de síntomas de Ascensión. Muchos de estos síntomas están relacionados con el movimiento y la eliminación de bloqueos de energía, y la desintoxicación de las emisiones de desechos tóxicos, lo cual se conoce como extinción. Durante la activación espiritual y la subsiguiente fase de extinción, uno puede experimentar Síntomas de Ascensión, como gripe o agotamiento. El sistema inmune esencialmente reorganiza el Mecanismo de Enraizamiento del cuerpo y restablece los niveles de base metabólica y homeostática para habilitar un funcionamiento más alto necesario para que el cuerpo pueda incorporar frecuencias solares más altas en las células. [1]
Referencias
Consulta también:
Notas
Traducido por: Karen Noack.
Texto original de Lisa Renee (publicado en https://ascensionglossary.com/index.php/Solar_Initiation)