Autoaceptación
Antes de que las personas comiencen a considerar cómo la autoaceptación juega un papel clave en el desarrollo del carácter personal, muchos olvidan que desarrollar el carácter a través de una mejor comprensión de la propia Autoestima es, sin duda, uno de los aspectos más importantes del desarrollo de la personalidad y del desarrollo espiritual. Al ganar autoaceptación, construimos una autoestima saludable, lo cual nos ayuda a establecer metas realistas con un propósito espiritual más elevado, y a cultivar virtudes, que son fortalezas de carácter que constituyen el poder de nuestra persona espiritual.
Para progresar en el proceso de Ascensión, fortaleciéndonos para convertirnos en personas equilibradas y funcionales, necesitaremos abordar áreas de nuestra autoaceptación y nuestra capacidad para acceder a estados de perdón. Encontrar una autoaceptación genuina y la capacidad de sentir y generar acciones de perdón hacia uno mismo y hacia los demás resulta fundamental para superar el estancamiento emocional. Ambos están profundamente entrelazados para desarrollar tanto una base más sólida de autoestima como nuestro centro interior. Para superar los problemas personales de baja autoestima, es necesario construir nuestra base interior, que nos permitirá desarrollar virtudes de carácter más sólidas. [1]
Virtudes de carácter
Las Virtudes de carácter como la Pureza, Dulce Amabilidad, Paciencia, Diligencia, Disciplina y Generosidad requieren una gran fortaleza personal para ayudarnos a desarrollar nuestro carácter. Es la fortaleza de carácter lo que nos permite afrontar con mayor facilidad los desafíos de la vida y afrontar el estrés de manera productiva y pacífica. A medida que desarrollamos la fortaleza de carácter, las virtudes se convierten en poderosas fuerzas energéticas que aportan gran armonía a nuestra vida, llenándola de paz, consuelo y alegría. Sin embargo lo que generalmente se malinterpreta es que, para muchas personas, las Virtudes parecen debilidades, cuando en realidad se trata de grandes fortalezas que son fuerzas de poder espiritual. Aunque es mucho más fácil vivir con defectos de carácter culpando a los demás de todos nuestros problemas. Esto crea una gran debilidad en nuestra base energética, sobre nuestro enfoque en la oración y sobre la fuerza de la meditación. Se requiere de gran valentía y fortaleza para ser honestos, enfrentarnos a nosotros mismos y estar dispuestos a realizar el trabajo emocional interior necesario.
Cuando alcanzamos un grado de Madurez Espiritual y estamos dispuestos a realizar nuestro propio trabajo emocional, somos enormemente recompensados más adelante en el camino espiritual con una increíble cantidad de poder, fuerza y concentración espirituales. Es la fortaleza de nuestra base interior y de nuestro carácter la que supera con creces las debilidades de gratificación instantánea del ego. Este fortalecimiento del carácter nos permite afrontar con mayor facilidad los numerosos desafíos y factores estresantes de nuestra vida cotidiana en el planeta Tierra. Cuando somos personas espiritualmente más fuertes y tenemos un núcleo o centro interior fuerte, esto fortalece nuestras habilidades para relacionarnos a través del desarrollo de nuestra confianza interior en lugar de la arrogancia del ego. Mejora nuestra capacidad para comunicarnos mejor con diversos tipos de personas, ya sea que estén en el camino de la Ascensión o no.
Un fuerte centro interior
Una persona con fuerte centro interior no necesita que los demás sean algo que no son, y no asume el dolor ajeno, su sufrimiento egoico ni sus acciones desesperadas como si fuesen enfrentamientos o insultos personales. En este nivel de consciencia, podemos ver que las personas sienten dolor cuando arremeten contra otras o tienen rabietas emocionales. Por lo tanto, nos negamos a jugar con los arquetipos del drama que alimentan ese mismo dolor. Aunque muchos no quieran admitirlo, se puede establecer un centro interior más sólido a través de la forma en que una persona construye su carácter, especialmente cuando la autoestima es un factor primordial en la formación de los valores y virtudes de una persona equilibrada. Sin un núcleo o centro interior fuerte, desarrollado con una sana autoaceptación y autoestima, las metas personales y espirituales se ven directamente afectadas, dejando a la persona con una sensación de confusión y caos respecto a sus circunstancias de vida. En medio del caos, una persona sin un centro interior fuerte no puede discernir la verdad del engaño.
Superar el autoengaño
En el camino de la Ascensión espiritual, reconocer la importancia de formar el carácter como una parte necesaria de tener amor propio y autoaceptación, resulta fundamental para progresar a través de bloqueos de autoengaño. Los bloqueos de autoengaño son niveles de negación egoica, son las medias verdades que nos decimos porque tememos ver el panorama completo que está bloqueando nuestra consciencia. Cuando tenemos baja autoestima, nuestros mecanismos de defensa egoicos actuarán para bloquear nuestro progreso, nuestro avance en la ascensión espiritual y evolución de nuestra vida. Alguien que entiende que es un recipiente espiritual amado y digno para el espíritu de la Fuente de Dios, comenzará a aprender que el amor propio es el centro de la autoaceptación, que es la cualidad que debemos desarrollar para sentir y experimentar verdaderamente el amor de Dios por todos nosotros. Una vez que sentimos Amor Propio construimos confianza interior, lo cual desarrolla nuestra confianza en la vida.
En estos tiempos caóticos, es fundamental fomentar la confianza en nuestra comunicación y relación con nuestro poder superior para que nos ayude a afrontar los desafíos que enfrentamos en la vida terrenal. Una persona con mayor confianza en sí misma se siente más estable en su base espiritual y estará más enfocada y decidida a alcanzar un mejor estado de consciencia en todos los aspectos de su vida, ya sea para su carrera, propósito espiritual, inspiración, familia o metas personales. Una vida pacífica y plena es más posible cuando uno busca la verdad interior y el autoconocimiento, mientras construye una relación con Dios y una relación con su propio ser.
El construir una relación con nuestro ser interior puede significar que tengamos que desarrollar nuestro carácter, incluso mediante experiencias de vida que no deseamos o preferimos. Debemos superar nuestros miedos que viven en las Casas del Ego para experimentar el logro de superar nuestras limitaciones mentales percibidas o nuestros hábitos del Ego Negativo. Si nuestras limitaciones mentales y/o nuestro derecho autoadquirido gobiernan nuestras acciones, nos atrasaremos en nuestro crecimiento y caeremos en una baja autoestima. [2]
Perdonar a los demás es perdonarse a sí mismo
Perdonar a otra persona o a circunstancias indeseadas en la vida, es lo más generoso que uno puede hacer por sí mismo. Cuando perdonamos a los demás por las transgresiones percibidas, nos liberamos de los vínculos, enredos y cordones de apego que manifiestan patrones dolorosos tales como juicios, resentimientos y enojo.
Perdonarte a ti misma/mismo es la acción más importante que puedes tomar para limpiar tanto los vínculos de autosabotaje y de victimismo como sus dolorosas heridas.
Una técnica de perdón es practicar la autoaceptación. Nadie necesita perdón simplemente por ser quien es. La práctica de perdonarse a uno mismo consiste en colocar nuestro enfoque sobre las cosas específicas que nos hacen sentir mal con nosotros mismos, en las cosas que nos hacen sentir inadecuados o indignos, en lugar enfocarnos en la verdad de la persona real que somos. Como técnica de perdón, la autoaceptación permite reconocer que somos buenas personas, con defectos y todo. Esto no significa ignorar las fallas ni dejar de esforzarnos genuinamente por mejorar, sino que nos valoramos por encima de TODO eso. Cuando nos reconocemos como seres completos, reconocemos nuestra autoestima y generamos el poder personal para dejar de permitir que estas faltas sean utilizadas como debilidades y frenen continuamente nuestro progreso y evolución a lo largo de la vida. Ámate incondicionalmente y date tanto el permiso como el tiempo necesarios para sanar.
Comprender la importancia del perdón radica en entender que el perdón nos lleva al momento presente, en lugar de obsesionarnos con las heridas y el dolor del pasado. El perdón permite vivir el presente en lugar de vivir en el pasado, lo que significa que puedes avanzar hacia el futuro con un propósito renovado, centrado en el cambio, la mejora y en construir sobre las experiencias actuales, en lugar de dejarte frenar por el dolor del pasado. Algunas personas temen perdonarse a sí mismas porque temen perder la identidad que han construido sobre la base del enojo, el resentimiento, la culpa y la vulnerabilidad. En este caso, podríamos preguntarnos si sentirnos victimizados y enojados, si sentirnos fácilmente heridos por los demás o actuar en forma reactiva en realidad conforma la identidad que uno quiere mostrar al mundo y con la cual quiere vivir. Pregúntate si la familiaridad de ponerte en el rol de víctima o victimario, o la seguridad percibida del ego que esta forma de pensamiento te ofrece, vale realmente la energía, el esfuerzo y el daño que le causa. [3]
Sin la capacidad de perdonar y aceptar las circunstancias, en relación con uno mismo y con los demás, uno no sólo se permite permanecer anclado en el pasado, sino que esto supone una enorme pérdida de energía para la salud emocional y física. La incapacidad de perdonar tiene su origen en el enojo y el resentimiento, dos emociones que pueden causar estragos sobre la salud y que pueden mantenernos estancados.
Autoestima
Para comprender y definir mejor la autoestima, se trata simplemente de tenerse en alta estima como resultado de muchos factores que determinan el valor como la persona única que cada uno de nosotros es. Es fácil recordar que Dios nos ama incondicionalmente y meditar con la intención de que la gracia de la bondad incondicional fluya a nuestro corazón para sentir amor propio. La autoestima puede ser desarrollada con amor propio y con una autoaceptación sana. La autoestima no implica considerar el propio comportamiento como siempre perfecto ni exigir que una persona sea intachable o irreprochable, sino que implica valorar la totalidad del ser como algo invaluable, valioso y único. El desarrollarnos positivamente como seres humanos implica que contemos con una autoaceptación y autoestima sanas. Este es un regalo que debemos aprender a darnos, especialmente si fuimos víctimas de un gran abuso y un trauma infantil. El Ejercicio del Espejo es probablemente la herramienta de autoaceptación y el ejercicio de autosanación más poderoso que puedas hacer, y el más sencillo también.
Ejercicio del espejo
Este ejercicio obtendrá el máximo beneficio si se repite a la misma hora todos los días durante unos 10 a 15 minutos. Los momentos más beneficiosos son a primera hora de la mañana al levantarse y a última hora de la noche antes de acostarse. Si no te es posible hacerlo en estos horarios, puedes reservar otros dos momentos de los cuales puedas disponer. Necesitarás un espejo de cuerpo entero con un espacio delante para poder pararte completamente desnudo frente a él y poder verte todo el cuerpo. La habitación debe tener una temperatura agradable para que no tengas ni demasiado calor ni demasiado frío.
Al pararte frente al espejo, separa los pies a la anchura de los hombros de modo que, si trazara una línea recta hacia el suelo desde el borde exterior de los hombros, esta línea toque la parte exterior del pie. Distribuye tu peso uniformemente sobre cada pie. Dedica unos instantes a contemplar tu reflejo completo y luego centra tu atención en un punto de tu frente, justo entre tus ojos y a unos 2 cm (1 pulgada) por encima de la línea de tus ojos. Durante todo este ejercicio, el mantra que debes repetirte (en voz alta para que tu cuerpo lo escuche) es: «Me acepto, en este momento, tal como soy». He escrito este mantra en inglés [«I accept myself, in this moment, just the way I am»], pero te resultará más beneficioso traducirlo a tu lengua materna. Si tu madre hablaba otro idioma o dialecto cuando estabas en su vientre, el usar esa traducción también te será beneficioso. Durante todo el ejercicio, coloca las manos con las palmas juntas frente a ti. Al comenzar, siente la presión en las palmas de las manos, subiendo por los brazos, los hombros, la espalda y el pecho. Esta es la presión entre izquierda y derecha, masculino y femenino, pasado y futuro. En algún lugar en el centro, encontrarás (con la práctica) un espacio "sin presión": este es el centro de tu ser y estará en algún lugar en el medio de tu cuerpo, en una línea directa con tu enfoque visual en tu frente. Durante todo momento, imagina que, en un ciclo de respiración, inhalas por la coronilla, llenas el centro y exhalas por las plantas de los pies.
El siguiente ciclo respiratorio es el inverso: inhala por la planta de los pies hacia el centro y exhala por la coronilla. Al respirar, permite que tu oído se concentre en el sonido que produce la respiración al recorrer tu cuerpo. Durante la respiración, permite que la exhalación libere cualquier pensamiento, impresión o sentimiento que pueda surgir, utilizando la inhalación para "llenar" el espacio vacío creado al liberar dicho pensamiento o sensación. Con la práctica, deberías poder encontrar un espacio entre la inhalación, la exhalación y la inhalación siguiente, y quizá descubras que «caes» en él. No puedes crear esta «brecha».
Comentario: Puede que necesites practicar este ejercicio varias veces hasta que todas las etapas se integren y te resulte natural. No busques ningún resultado; simplemente practica por practicar y, tras un tiempo de liberar toda tu incomodidad, la práctica hará su efecto. Cuando lo haga, lo sabrás y la experiencia será solo tuya.
Por favor ten en cuenta: Si utilizas este ejercicio conscientemente involucrando a otra persona por cualquier motivo, lo más probable es que inmediatamente te infectes con todas las enfermedades subconscientes e inconscientes que la otra persona pueda padecer. Este ejercicio del espejo es entre tú y tu propio reflejo.
Referencias
- ↑ Autoaceptación (en inglés)
- ↑ Autoaceptación (en inglés)
- ↑ [Wiki How: Forgiveness]
Notas:
Traducido por Karen Noack.
Texto original de Lisa Renee (publicado en https://ascensionglossary.com/index.php/Self_Acceptance)